
Es la famosa ecuación de Einstein. ¿Quién no la conoce?, ¿Quién la entiende bien y no por culturilla?
Hoy quería colgar algo, también de Einstein, menos famoso pero más valioso, y más valioso aún por ser de un hombre que no se conformo con ser inteligente, sino que se dedico a pensar... y a demostrar con su vida, como decía un gran amigo, "que en el único lugar donde el éxito esta antes del trabajo es en el diccionario". Dedico su vida a trabajar y utilizo sus logros para buscar la paz y aportar a la humanidad todo lo que sus energías y su tiempo le permitiesen (elementos , recordemos, que poseen nuevo significado gracias a sus trabajos).
Aquí van sus palabras:
"Curiosa es nuestra situación de hijos de la Tierra. Estamos por una breve visita y no sabemos con qué fin, aunque a veces creemos presentirlo. Ante la vida cotidiana no es necesario reflexionar demasiado: estamos para los demás. Ante todo para aquellos de cuya sonrisa y bienestar depende nuestra felicidad; pero también para tantos desconocidos a cuyo destino nos vincula una simpatía.
Pienso mil veces al día que mi vida externa e interna se basa en el trabajo de otros hombres, vivos o muertos. Siento que debo esforzarme por dar en la misma medida en que he recibido y sigo recibiendo. Me siento inclinado a la sobriedad, oprimido muchas veces por la impresión de necesitar del trabajo de los otros. Pues no me parece que las diferencias de clase puedan justificarse: en última instancia reposan en la fuerza. Y creo que una vida exterior modesta y sin pretensiones es buena para todos en cuerpo y alma."