viernes, 20 de marzo de 2009

El sueño de la razón produce monstruos


La frase es de uno de los Caprichos de Francisco de Goya, ¡otra vez el de Fuendetodos viene a despertar mi blog!
La razón es la capacidad de inferir y formar juicio. Solo cuando las cosas han ocurrido nos damos cuenta de que estaban allí, por algún motivo nuestra razón estaba dormida, y al aparecer el monstruo esta despertó... demasiado tarde, el mal esta ya hecho.
Nos sucede en épocas de bonanzas, el bienestar suele cegarnos o damos por sentadas muchas cosas sin haber profundizado, o bien creemos que lo malo no puede ocurrir: ¡¡nos dormimos!!
¿Y que pasa según Goya cuando se duerme la razón? Monstruos!
Para mi un monstruo puede ser un crack o un un ser espantoso. Curiosamente uno de los que apareció en estos meses, que vimos al despertarnos, encaja en los dos significados: Bernard Madoff. Este señor realizo una estafa monumental, algo increíblemente bien montado. El fraude consistía en ofrecer un producto financiero altamente rentable, con una alta tasa de retorno de la inversión, y obtenía estas rentabilidades no de realizar inversiones, si no del dinero de los nuevos aportadores a su producto financiero... y mientras tanto el dinero que no devolvía como rendimientos a sus inversores lo iba guardando en lo que podríamos nombrar sus inversiones seguras.
El esquema de la misma es simple, pero difícil. Imaginen una pirámide (la pirámide tiene, por su inventor, otro monstruo, nombre: Ponzi), se dice a alguien que ponga su dinero en algo altamente rentable, este lo hace, inmediatamente, se le devuelve, utilizando su propio dinero, el primer rendimiento de su inversión. Este feliz, habla de su talento como inversor, de las ventajas de invertir en este producto (del que desconoce su funcionamiento) y pronto más gente viene y realiza la misma operativa. El gestor de inversiones gana prestigio y más gente viene... y así hasta incluir a toda la población mundial (pueden ser personas o instituciones), o bien todo el dinero del mundo, ya que los inversores pueden volver a invertir con más dinero o incluso con los rendimientos obtenidos de participar en la pirámide. Una vez que deja de entrar dinero la pirámide cae, ya que no se pueden ofrecer rendimientos ni devolver la inversión original.
Por desgracia para el monstruo la estafa duro casi 40 años, algo increíble. Las necesidades de dinero en efectivo provocadas por la actual crisis disminuyeron el interés por realizar inversiones, y aumentaron la necesidad de realizar desinversiones... ambas causas acabaron el flujo de efectivo para Madoff y por consecuencia para los inversores y la pirámide cayo... por suerte sobre el monstruo.
Yo he pensado que en finanzas a rendimientos alto, riesgo alto. ¿Los inversores no se lo esperaban? Y si Madoff se hubiera planteado ofrecer rendimientos menores, ¿se habría caído su pirámide?
Es increíble lo codiciosos que somos.
(en la foto, Madoff va a su juicio con su mejor traje)